Los Juegos Olímpicos de Tokio, a celebrarse entre el 23 de julio y el 8 de agosto, no contarán con público en los estadios, así lo determinaron los organizadores y el gobierno japonés.
El alza de casos que atraviesa la capital japonesa ha llevado a los organizadores de la competición y a las autoridades de la nación asiática a tomar esta medida a 15 días de la ceremonia inaugural.
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La presidenta del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio, Seiko Hashimoto, dijo que “se ha tomado una decisión muy dura”. Hashimoto dijo que, debido al Covid-19, no tienen “más remedio que celebrar los juegos de forma limitada”.
Japón declaró este jueves estado de emergencia en Tokio, alerta que estará vigente hasta el 22 de agosto y que coincidirá con la celebración de los Juegos Olímpicos.
El primer ministro japonés, Yoshihide Suga, declaró, después de reunirse con el comité gubernamental que gestiona la pandemia, que el estado de emergencia entrará en vigor el lunes 12 de julio para frenar el aumento de casos de coronavirus en la capital.
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La medida no impedirá muchos cambios con respecto a la situación actual, al margen de un endurecimiento de restricciones para los comercios.
Asimismo, Japón prolongó el nivel de alerta en la región de Okinawa, donde ya se encontraba activa, y mantuvo ciertas restricciones en las prefecturas de Chiba, Saitama y Kanagawa, colindantes con Tokio y donde también se disputarán competiciones olímpicas.
El 21 de junio, los organizadores de los Juegos Olímpicos anunciaron que los aforos de los estadios se reducían a la mitad, con un límite máximo de hasta 10 mil espectadores nacionales por recinto con una condición, que no se volviese a declararse un nuevo estado de emergencia.
JGR
