El día viernes ocho de julio los abogados de Elon Musk hicieron pública la noticia de que el empresario ejercería su derecho de cancelar definitivamente la compra de Twitter, después de haber pausado la misma hace dos meses.
El empresario solicitó al CEO de la red social Bret Taylor le entregara un informe preciso sobre el número de cuentas falsas con las que cuenta la plataforma, Twitter entregó su informe pero tal parece que el dato de que sólo el cinco por ciento del total de las cuentas son spam, no convenció al sudafricano empresario.
Así que decidió retirar la oferta, acción que le acarreará problemas legales debido a que Twitter le demandará por incumplimiento de contrato, sin importar que recibieron una indemnización económica de mil millones de dólares por parte de Musk por haber cancelado un acuerdo de 44 mil millones de dólares.
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Estas medidas son comprensibles por parte de Twitter, pues perdió seis por ciento de sus acciones por la noticia de la cancelación.
Expertos aseguran que la razón de las cuentas falsas es una cortina de humo para cubrir la verdadera que es sobre las deudas que acarrea como compañía Twitter, pues Elon Musk sabía desde el principio que no existía mecanismo confiable que pudiera verificar que cuentas son falsas y cuáles verdaderas en su totalidad.
Después de dos meses y medio de la primera propuesta el acuerdo “se enfría” y se cancela todo.