La noche del sábado 25 de junio, 21 jóvenes estudiantes murieron en extrañas circunstancias tras haber asistido a una fiesta de fin de cursos.
Los hechos ocurrieron en el bar clandestino “shebeens” en East London Sudáfrica, los servicios de emergencia fueron alertados de que varios jóvenes estaban inconscientes sobre las mesas y sillas de un bar.
Las ambulancias trasladaron a cuatro personas de entre los 13 a los 18 años a los hospitales correspondientes pero durante el camino murieron, 17 murieron en el lugar de los hechos.
De las 21 víctimas, 13 eran hombres y nueve mujeres.
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Algunas versiones señalaron que se debió a una estampida, otra que fue una intoxicación mediante las bebidas alcohólicas y otra que fueron envenenados con gas pimienta.
Entre los sobrevivientes se pronunció que los síntomas perceptibles eran dolor de cabeza y corporal, náuseas, desmayos y en algunos casos se pudieron incorporar tan solo con ser mojados.
Las autoridades confirmaron que los cuerpos no mostraban señales de tortura.
MGG
