Aunque formalmente Rusia no le ha declarado la guerra a Ucrania, la opción está latente y el mundo como lo conocemos hasta ahora puede cambiar drásticamente de un momento a otro.
Una pregunta recurrente entre las personas preocupadas por la situación es ¿Qué se va a comer, si estalla un conflicto mundial?
Pero ¿porque sucedería esto? Si un país decide arrojar una bomba nuclear, lo que sucedería es que el impacto en la tierra sería tan grande, que levantaría una capa de denso polvo en la atmosfera, lo que impediría que pasen los rayos de sol, por lo cual la agricultura y ganadería quedarían colapsadas en máximo cinco años.
Además, el clima cambiaría al no pasar la luz solar, también incrementaría el frio y la mayoría de los animales y plantas morirían.
A este fenómeno se le conoce como “invierto nuclear” y según científicos tendría una duración de 15 años aproximadamente.
Ante tan catastrófico escenario, la mayoría de las personas morirían, así se encuentren a millones de kilómetros de distancia del punto donde cayera un arma nuclear, unos morirían por la radiación y los pocos que sobrevivieran, morirán de hambre.
Las únicas personas que podrían seguir viviendo serían las que estén capacitadas para cultivar sus propios alimentos.
Algunos alimentos que son resistentes a las condiciones del clima y que pudieran sobrevivir ante la contaminación, la falta de agua y de sol, serian: Verdolagas, lechuga, menta, apio, hongos y espinacas.
Las personas que no tengan los conocimientos, habilidades y recursos para poder montar su propio huerto, tendrían que buscar plantas silvestres, semillas, raíces, larvas e insectos para comer.
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Lo realmente alarmante es que, para cubrir una dieta de tres tiempos al día, una persona tendría que consumir 40 insectos.
Sin duda son consecuencias a las que nadie quiere llegar.
MGG