Muchas veces deseamos cambiar malos hábitos o introducir nuevas rutinas en nuestro día a día y no sabemos ni por dónde empezar. Nos llenamos de buenas intenciones, nos repetimos “mañana empiezo”, pero ese mañana nunca llega. Surgen problemas, excusas, otras prioridades, “no tenemos tiempo”.. y vuelta a empezar, con la frustración que conlleva el ver que no somos capaces de arrancar, lo que aumenta la desmotivación y disminuye nuestra autoconfianza (“no soy capaz”).
A veces incluso conseguimos iniciar una nueva rutina durante un tiempo (dejar de fumar, hacer deporte, comer sano, ser más organizado, ser más puntual..) pero de repente un día volvemos a los viejos hábitos y abandonamos. ¿Frustrante no? ¿Te ha pasado?
Otras veces esperamos a “Sentirnos Motivados” para empezar .. y esa motivación nunca llega, o dura poco. El problema es que la motivación viene con la acción, y no al revés: no es algo que se “encuentra” o “se pierde” sino que has de crearla, y cuando desaparece es un síntoma de que algo estamos haciendo mal (objetivos muy grandes, mala planificación, no tener claros los “por qué”.. etc) La motivación es un proceso que implica a tus necesidades, diálogo interno y diseño del camino: se construye mientras actúas (y no antes).
Sin embargo cambiar nuestros hábitos e introducir nuevas rutinas es posible, no sólo eso sino que también es posible que esos cambios sean permanentes. ¿Quieres saber cómo conseguirlo? sigue leyendo…
¿Cómo se crea un hábito?
Los hábitos (buenos o malos) no nacen espontáneamente, se aprenden.
Un hábito se forma como resultado de una acción que repites frecuentemente y que se ve reforzada por una consecuencia positiva.
La formación psicológica de los hábitos es un proceso de aprendizaje que consta de:
- Estímulo Activador: Estímulo que promueve el inicio de una conducta.
- Acción: La acción o actividad llevada a cabo.
- Recompensa: El beneficio obtenido, después de realizar la acción.
Para que el hábito se cree hemos de repetir el suficiente número de veces éste patrón para que el cerebro cree las conexiones neuronales implicadas en la realización de la conducta que queremos fomentar. Por lo que el factor clave es la repetición.
Una vez que el cerebro establece esta conexión neuronal, entonces la acción se iniciará siempre que aparezcan los estímulos activadores: se convierten en hábitos que se ejecutarán de forma prácticamente automática, sin requerir excesiva atención o esfuerzo por tu parte.
Persevera y triunfarás.
La diferencia entre lo posible y lo imposible reside en la determinación.
Seguramente habrás oído hablar de estudios donde se establece que es necesaria la repetición de una acción durante un número determinado de días para crear un hábito. Según los últimos estudios son necesarios 66 días para fijar de forma permanente una rutina (ver estudio).
Iniciar nuevas rutinas requiere una mayor fuerza de voluntad, automotivación, y acción consciente, hasta que podamos convertirlas en hábitos, y entonces nos resulte mucho más fácil.
Todos llevamos a cabo diariamente numerosas conductas automatizadas y poseemos numerosos hábitos en nuestra rutina diaria (desde lavarte los dientes al lugar donde dejas las llaves por ejemlo), sin embargo, muchas veces cuando queremos promover un cambio en nuestra vida no sabemos cómo afrontarlo, abandonamos antes o al poco de empezar.. no conseguimos esos 66 días de repetición, esto nos frustra y pensamos que no somos capaces de cambiar.. ¡pero si podemos! Tienes un montón de hábitos aprendidos, ya lo has hecho antes aunque no te dieras cuenta. Todos tenemos la capacidad de decidir sobre nuestra conducta y crear nuevos hábitos.
¿Qué necesitamos para crear nuevos hábitos de forma eficiente?
Te recomiendo que cojas papel y bolígrafo y trabajes por escrito. Ya os he comentado en varias ocasiones la importancia de trabajar por escrito todo lo que se refiere a la comunicación con nosotros mismos ¿ya tienes tu libreta de trabajo lista?
Paso 1: preparándonos.
Enumera en tu libreta de trabajo:
- Hábitos que deseas cambiar y cuáles pondrás en su lugar. (Por ejemplo: dejar de levantarme tarde los Domingos quiero cambiarlo por levantarme a las 9 e irme a patinar. Dejar de fumar y en su lugar practicar técnicas de meditación) Es importante que incorpores un “buen hábito” por cada “mal hábito” que desees erradicar de tu vida.
Paso 2: Fomentar la autoconfianza. La mejor versión de mí mismo.
Paso 3: Encuentra el átomo de tus metas.
Paso 4: Diseñando nuestro nuevo patrón.
Paso 5: El quid de la cuestión es la repetición, repetición, y repetición. Fomentando la constancia.
Paso 6: Avanza poco a poco. No tengas prisa por llegar.
Paso 7: Prevenir baches en el camino y retomar la marcha después de una caída.
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JVR