Una joven relató en TikTok la ocasión en que entró a una casa pensando que era un cibercafé, y en la que le ofrecieron refresco y pozole. Por su puesto el video se volvió viral.
La usuaria, identificada como Fathyma Lex, confesó que esto sucedió aproximadamente hace 3 años, cuando necesitaba imprimir unos documentos de la universidad para una beca, por lo que caminó hacia el Centro de la ciudad ya que dijo vive en las orillas.
Después de recorrer sin éxito varias calles en busca de un cibercafé (pues los que encontraba estaban cerrados o no tenían impresoras) dió con un local -o eso parecía- en donde había una impresora y entró.
“Seguí caminando y caminando hasta encontrar un ciber. Y eso pasó, encontré uno que la verdad sí se me hizo muy peculiar porque nada más tenía dos computadoras, pero dije ‘éste no es el momento de estar de juzgona’ y me metí”.
De acuerdo con la joven, al supuesto cibercafé al que llegó tan solo tenía dos computadoras, algo que se le hizo muy raro, sin embargo, tenía mucha prisa por imprimir sus documentos, por lo que no le tomó importancia.
El señor que se encontraba en el lugar al ver a Fathyma no le dijo nada sobre la situación, incluso, la joven mencionó en el video que cuando le pidió un mouse para poder utilizar la computadora se lo prestó.
Momentos después llegaron dos niños de la escuela y comenzaron a platicar con el señor, cuando uno de los pequeños se acercó para darle un vaso de refresco, por lo que la joven se sorprendió del servicio del supuesto cibercafé, hecho que considero una cortesía.
Fathyma seguía trabajando cuando de nuevo el niño se acercó a ella y le ofreció pozole, pues estaban a punto de comer .
“Que si no quieres pozole”. “¿Pozole?”. Si, ahorita vamos a comer, que si no quieres comer con nosotros”, .
La Tiktoker mencionó que negó la invitación a comer con la familia, pues estaba a punto de terminar con la impresión de sus documentos, por lo que al preguntar cuánto dinero debía del tiempo y las impresiones se llevó la sorpresa.
El señor negó a la joven el pago por haber utilizado la computadora e impresora, por lo que ella volvió a insistir y preguntó por qué no quería el dinero, por lo que el hombre le confesó que no era un cibercafé, sino su casa.
De acuerdo con la tiktoker, el señor no le dijo nada porque estaba muy concentrada.
“Yo sentí la cara caliente de vergüenza y le agradecí muchas veces y le dejé 20 pesos”, confesó la chica.
Fathyma también dijo que luego de recibir su primer pago de la beca compró una impresora para que este tipo de situaciones no le volvieran a suceder.
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