La tarde del viernes, un violento tornado azotó la ciudad alemana de Paderborn (oeste), dejando casi 40 heridos, “varios de ellos graves”, e “inmensos daños”, así lo informaron los servicios de emergencia locales, así como importantes daños por toda la localidad.
“38 heridos, varios de ellos graves, fueron trasladados al hospital” indicaron los bomberos de esta región a través de su cuenta de Twitter. Una persona “está en peligro de muerte”, confirmó la policía local.
El tornado golpeó la ciudad a última hora, desprendió techos y arrancó árboles. También volcó vehículos e hizo saltar por los aires las ventanas de muchos edificios. El fenómeno meteorológico se produjo luego de varios días con temperaturas inusualmente altas para esta época del año en la región que fue afectada.
En la región de Renania – Palatinado, que también fue afectada por las tormentas, un hombre de 38 años falleció por una descarga eléctrica al entrar en un sótano inundado por las tormentas, indicó la policía de Coblenza.
La tempestad ocasionó innumerables destrozos en el oeste de Alemania, en redes sociales se muestran imágenes de los vehículos volcados y destruidos.
Un portavoz de los bomberos mencionó que también se produjo un tornado en Lippstadt, una región que se encuentra aproximadamente a unos 30km de Paderborn, sin que hasta el momento se registraran heridos. De todas maneras, el campanario de la iglesia de esta ciudad fue arrancado por la violencia de las ráfagas, según se muestra en redes sociales.
En Paderborn, la policía evaluó en varios millones de euros los daños causados por la tormenta que también movilizó a 350 efectivos del personal de emergencias. El tráfico ferroviario de la zona sufrió perturbaciones por las consecuencias del tornado y la policía instó a los habitantes a permanecer en sus casas.
Los servicios meteorológicos habían previsto fuertes ráfagas y lanzado alertas de tempestades para el viernes, con ráfagas de hasta 130 km/hora.
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