Ciudad de México- Canadá aplaudió un reporte difundido hoy por la Organización Mundial de Comercio (OMC) sobre la querella comercial interpuesta por los gobiernos canadiense y mexicano en torno al etiquetado de carne en Estados Unidos.
El reporte del panel de la OMC concluye que el etiquetado de país de origen en la carne que se comercia en
Estados Unidos “tiene un efecto perjudicial en las oportunidades de competencia del ganado canadiense y mexicano importado, y por tanto concede un trato menos favorable”.
El etiquetado de país de origen, conocido como COOL (Country of Origin Labelling), fue impuesto por el gobierno estadunidense en 2008 y obliga a los productores y procesadores de carne de res y puerco a etiquetar el bien conforme al lugar de origen del animal.
El reporte de 206 páginas concluye que Estados Unidos ha actuado “de manera incompatible con el párrafo 1 del artículo 2 del Acuerdo OTC y el párrafo 4 del artículo III del GATT de 1994”, lo que ha “anulado o menoscabado” las ventajas para Canadá y México en esos acuerdos.
En consecuencia, la OMC recomienda que el Órgano de Solución de Diferencias solicite a Estados Unidos que ponga “la medida incompatible en conformidad con las obligaciones que le corresponde en virtud del Acuerdo OTC y el GATT de 1994”.
Los productos canadienses afectados por la medida COOL son el ganado bovino y porcino importado que se utiliza en Estados Unidos para producir carne de bovino y de porcino.
El comercio de carne y ganado entre Canadá y Estados Unidos supera los cinco mil millones de dólares anuales, según datos del ministerio canadiense de Comercio Internacional.
Luego de conocerse el reporte de la OMC, los ministros canadienses de Comercio Internacional, Ed Fast, y de Agricultura y de Agroalimentos, Gerry Ritz, aplaudieron la conclusión del estudio y reafirmaron la posición de su país.
La medida estadounidense es “abiertamente proteccionista” e incumple con las obligaciones de la OMC, afirmaron.
El organismo internacional de comercio se ha manifestado “clara y consistentemente” en favor de la posición de Canadá y envía un mensaje claro a Estados Unidos.
“Termine con su política proteccionista que crea un daño económico en ambos lados de sus fronteras y cumpla con sus obligaciones comerciales internacionales”, resumió Fast.
“La política COOL afecta los negocios y a los trabajadores tanto en Estados Unidos como en Canadá y el gobierno canadiense continuará apoyando a los granjeros para hacer que esta medida sea removida”, agregó el ministro Ritz.
Los ministros enfatizaron la “profunda molestia” de Canadá porque Estados Unidos no ha hecho los cambios necesarios para cumplir sus obligaciones comerciales.
Urgieron al gobierno del presidente Barack Obama a hacer los cambios legislativos necesarios para eliminar la medida COOL, que da “un trato discriminatorio” contra el ganado canadiense.
“Seguiremos observando muy de cerca esta situación para asegurarnos que Estados Unidos cumpla con los reglamentos de la OMC”, señalaron los ministros.
Incluso advirtieron que de no ser así, “buscaremos la autorización para implementar medidas regulatorias a los productos agrícolas y no agrícolas estadounidenses si es necesario”.