Tras los ataques iniciados en la madrugada de este jueves de Rusia en contra de Ucrania, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden advirtió que defenderá a sus aliados.
En un mensaje transmitido desde la Casa Blanca, el mandatario aseguró que sus fuerzas militares no se involucrarán en una disputa con Rusia y solo se encargarán de defender a los aliados de la organización del Tratado del Atlántico Norte “con la fuerza del poder norteamericano”.
“La OTAN autorizó un plan de acción de respuesta, va a unir fuerzas para desplegar donde y cuando sea necesario”, adelantó.
Dejó claro que su país limitará la capacidad de Rusia para hacer negocios en moneda extranjera, competir en materia tecnológica y financiar a sus fuerzas militares, con la ayuda de sus aliados de la OTAN.
“Vamos a limitar la posibilidad de Rusia de tener yenes, libras esterlina, dólares, la posibilidad de hacer negocios en el mundo”, amenazó luego de que la decisión del presidente, Vladimir Putin, de invadir Ucrania provocara la peor crisis de seguridad en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
También anunció bloqueos a Sberbank –el banco más grande de la nación del Kremlin– y a otras cuatro instituciones financieras que representan un estimado de mil millones de dólares en activos, así como a un número grande de élites rusas y sus familiares.
Sobre estos últimos manifestó que “son personas que ganan de este tipo de actividades criminales y van a compartir el dolor”.
Las demás sanciones incluyen la confiscación de activos de compañías y la imposición de controles de exportación.
Agregó que estas restricciones implicarían un “grave costo para la economía rusa”, horas después de que tanques, tropas y aviones del ejército ruso ingresaran a Ucrania y se acercaran a su capital, Kiev.
“Putin es el agresor, es el que seleccionó guerra, ahora está aquí para enfrentar consecuencias”, espetó.
Sin embargo, se abstuvo de imponer medidas más severas, incluida la exclusión de Rusia del sistema de pago SWIFT, que permite las transferencias de dinero de un banco a otro en todo el mundo, o al sector energético ruso.
Con información de AP y Bloomberg
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