Desde la llegada de Trump al poder, el destino de los migrantes mexicanos en Estados Unidos es incierto, por lo que es urgente reforzar los trabajos de ciudadanización de inmigrantes
Ciudad de México.- La política migratoria en los primeros 100 días de Donald Trump se ha caracterizado por acciones xenofóbicas contra migrantes, especialmente de países musulmanes y migrantes latinoamericanos a quienes llama mexicanos de forma genérica.
A pesar de que Trump aseguró que el endurecimiento de sus políticas anti inmigrantes, se concentrarían en deportar a los “Bad hombres”, esta semana, en el estado de Texas se aprobó una ley que prohibe la existencia de “ciudades santuario”.
Estas ciudades impiden que cualquier migrante sea perseguido por las autoridades federales, si no ha cometido nada ilegal, salvo haber ingresado al país.
Juntos podemos es una la organización que más migrantes mexicanos a ayudado y una de sus tareas principales es la ciudadanización y naturalización de residentes e inmigrantes indocumentados.
Esta labor es particularmente importante en tiempos en los que nuestros connacionales se encuentran vulnerables al riesgo de perder su trabajo, su patrimonio y ser separados de sus familias a causa de la inminente deportación que la desaparición de sus santuarios supone.