Vladimir Putin encabezó el desfile naval con motivo del ‘Día de la Flota’ que según el Kremlin este año reunió en la ciudad de San Petersburgo a más de 40 buques y submarinos, 42 aviones y más de 3, 500 militares.
De acuerdo con esta tradición rusa, inaugurada en 2017 por petición de Putin, las fuerzas navales desfilan durante dos horas en el puerto de Krondstadt. Inspirada por una celebración similar de la era Imperial, esta demostración pretende conmemorar el papel del ejército del mar ruso, y se celebra siempre en el último domingo del mes de julio.
“¡Saludos camaradas! ¡Les felicito por el Día de la Armada!”, dijo Putin abordo de la lancha con la que surcó las aguas del Golfo de Finlandia acompañado por el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú.
El jerarca ruso anunció durante su discurso, que la flota rusa obtendrá un nuevo misil de crucero hipersónico Zircon “en los próximos meses”.
Las fuerzas navales de Rusia “son capaces de infligir una respuesta fulminante a todos aquellos que decidan atentar contra nuestra soberanía y libertad”, aseguró Putin, antes de subrayar que su equipamiento militar “se mejora constantemente”.
Con un alcance máximo de más de 1.000 kilómetros, los misiles de crucero Zircon pertenecen a una serie de nuevas armas desarrolladas por Rusia, que Putin describe como “invencibles”. Rusia lleva desde octubre de 2020 probándolas.
Según Putin, la fragata Amiral Gorchkov obtendrá los misiles primero. Añadió que la zona de despliegue del buque se elegiría en función de “los intereses de seguridad de Rusia”.
“La Patria es una noción sagrada para todos nosotros, y defenderla es un deber y el sentido de la vida para cada uno de nosotros”, agregó el líder del Kremlin.
En Sebastopol, en la Crimea anexionada por Rusia, los festejos se cancelaron después de que un ataque con drones contra el cuartel general de la flota rusa del mar Negro dejara seis heridos. Las autoridades locales acusaron a “los nacionalistas ucranianos” de haber llevado a cabo el ataque, pero Ucrania lo desmintió.